En la capital estuvo trabajando en una casa de la burguesía catalana, sirviendo. Cuidaba de la casa y de los chavales, dos chicas y un chico. Tan modernos, tan ricos, aquellas vacaciones en Rosas, las fiestas...
Les unió una amistad que todavía perdura.
Durante mucho tiempo nos mandaron unas preciosas poesías en catalán que encargaban editar para Navidad, junto con sobrasada y turrón artesano. Siempre preguntan por mi, porque yo nací en Barcelona, y les parecía que eso marca. Hace poco querían cerciorarse de que si, como catalana, estoy a favor de la independencia.
Nunca han perdido el contacto y se llaman de vez en cuando. Y es que hay amigos que, aunque no te veas, son para siempre.
Mi madre en la Plaza Cataluña |
Felisa y mi madre. Parecen Sofía Loren y Gina Lollobrígida |
En Rosas |
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